Una semana en el motor de un autobús, trabajando, dudando, vomitando. Herramientas que no tengo, clavos ensangrentados, momentos bellos y bonitas imágenes. Tantas cosas por hacer y tantas cosas no hechas, una larga semana aún sin terminar y sin conocer su final, todo se estrecha para bien o para mal. No quiero enumerar momentos ni situaciones, pero todo se junta y multiplica. Tanto tiempo viendo los días pasar sin saber como atraparlos y disfrutarlos, y ahora en el peor momento se estira, la vida por segundos, por minutos, de sesenta por sesenta, nada de veinticuatros, nada de sietes, atrapado. Lo peor de todo es que tengo la sensación o certeza de que no ha hecho mas que empezar.jueves, 13 de mayo de 2010
La semana mas larga de mi vida
Una semana en el motor de un autobús, trabajando, dudando, vomitando. Herramientas que no tengo, clavos ensangrentados, momentos bellos y bonitas imágenes. Tantas cosas por hacer y tantas cosas no hechas, una larga semana aún sin terminar y sin conocer su final, todo se estrecha para bien o para mal. No quiero enumerar momentos ni situaciones, pero todo se junta y multiplica. Tanto tiempo viendo los días pasar sin saber como atraparlos y disfrutarlos, y ahora en el peor momento se estira, la vida por segundos, por minutos, de sesenta por sesenta, nada de veinticuatros, nada de sietes, atrapado. Lo peor de todo es que tengo la sensación o certeza de que no ha hecho mas que empezar.
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Como otras veces, contando sensaciones sin contar el qué...
ResponderEliminarAl menos sabemos que tú will survive, menos mal. Está bien, porque lo que no mata, engorda.
Como otras veces, no quiero entrar en enumerar las situaciones, pero si estados de ánimos de un ceramista y las circunstancias de su entorno, mi entorno. Besos.
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